sábado, junio 23, 2012

¡Qué emoción!

No, no es que esté contenta por algo en particular... no es que una sonrisa enorme, de esas de oreja a oreja se dibuje en mi cara... en realidad a lo que me refiero es a que mis emociones van y vienen, suben y bajan, se revuelcan y dan maromas... en fin, están tan locas como los murciélagos que las transportan de un lado a otro.

Hoy venía con la intención de escribir tonterías, despotricar en contra del primero que me pasara enfrente... quería gritar que estoy cansada de muchas cosas y necesitada de otras. Estoy enojada, un poco tristona y decepcionada de unos 'algos' y quizá algunos 'alguienes'... estoy, puede que también, un poco histérica y con ganas de que algo pase, no sé qué... algo, lo que sea.

No voy a hacerlo, no voy a decir ninguna de esas palabrotas que tan bien me salen... tampoco quiero llorar, soy bien macha y me aguanto... solo voy a teclear lo que salga, si sale.

Me preocupan las caídas, me asusta que llegue el momento en que ya no pueda o quiera levantarme. Soy luchona... una guerrera, dirían algunos... pero las guerreras también nos cansamos, también tenemos límites y dejamos de soñar con ganar la guerra... Cedemos y aplicamos estrategias que, tristemente y de manera eventual, algún día dejarán de ser efectivas. Ya ni sé lo que digo... o escribo.

A ratos me atrevo a soñar, a creer que todo puede ser mejor, a pensar que mi trabajo es suficiente para mantenerme en guardia... y luego sucede que me topo con gente que, con burlas incluidas, me tumba el teatrito y, de paso, me tumba a mí. Bah.

Es tu culpa, chida... es lo que me dirían ustedes y, ya sé, tendrían razón... No me hagan mucho caso, la emoción de este momento es más bien mamonsona.

Soy la chida de la historia.


miércoles, junio 13, 2012

Despedida...

Hace un chingo de calor por estos rincones del bajío mexicano, estoy sentada frente a este monitor que me ha acompañado en momentos difíciles, como este… Trato de escribir la despedida del proyecto RadioShowRH que, como se ha repetido en las distintas emisiones últimamente, no sabemos si volverá… o no.

Podría aludir a mi chidez y decir que puedo con todo, que soy bien chingona y que jamás he temido a reto alguno… pero estaría mintiendo. Hace varios meses tuve la oportunidad de enfrentarme a un micrófono y, aunque yo siempre he dicho: ‘zapatero a tus zapatos’, por esta vez me permití incursionar en un área que no es la mía, al menos no lo era hasta ese momento.

Pocas cosas me animan a tomar el riesgo… pero cuando lo hago de la mano firme del hombre que hace que mis días sean distintos, el miedo desaparece de manera automática. Así sucedió cuando recibí la propuesta de traducir mis textos y expresarlos a través de mi voz… después surgió la oportunidad de una transmisión semanal con música y comentarios a libertad mía y de quien me acompaña, no solo en esta aventura radiofónica, sino en los pasos… a ratos lentos, que doy día a día en mi vida.

¿Cómo puedo no agradecer?... no quisiera despedirme, no quisiera llorar y, sin embargo, estoy segura que al momento de leer esto al aire, como es mi propósito, las de cocodrilo ya estarán embarrando mi carita pecosa…

(Tomo aire y trato de continuar…)

El año pasado Rafa Torres nos dio la oportunidad de colaborar con él en su espacio radiofónico: Rafahawkeye.com Nunca pensé que podría hacerlo y sí… bien o mal lo he hecho pero, ojo… sola no habría podido… Aquí, por última vez frente al micrófono, tendré que decir: GRACIAS, Rafa… GRACIAS, Héctor (te amo)… Gracias, familia y queridos amigos radioescuchas que, además de regalarnos su tiempo, nos regalaron también momentos inolvidables (risas, confidencias, lágrimas, situaciones personales, etc.) y, lo más importante, su cariño y amistad…

(Puta!, ya estoy chillando de nuevo…)

Definitivamente me disgustan las despedidas… pero esta es inevitable porque, si bien seguiremos en contacto vía Twitter, el micrófono hará falta para que, aunque sea con mi vocabulario de trailero malhumorado, pueda decirles tantas y tantas cosas que 140 caracteres no me permiten…

Los miércoles cobraron un sentido distinto… como jamás lo habían tenido. Confieso que el Radioshow me cambió la vida, nada sería igual sin el, sin ustedes…

Nuevamente, gracias por todo y tanto inmerecidamente…

Gracias, Suavecito…

Soy la chida de la historia.

viernes, junio 08, 2012

Ausencia...

A ratos me siento fuera de mí misma, lejos de esta realidad que se me embarra en la cara y me hace manita de puerco... quizá es que preferiría ausentarme un tiempo y volver cuando todo esté mejor... pero creo que mi presencia es necesaria para conseguirlo, ¿o no?.

Quisera entrar en una burbuja grandota y acolchonada, quisiera llevarme dos pares de libros, comida suficiente para unos cuantos días y encerrarme, con mi Tarzán, por supuesto... pero me pregunto si unos cuantos días bastarían pera sentirme mejor, menos 'ida', más yo...

Las cosas parecen irse preparando para volver a ser como eran antes... o, al menos, mejor de lo que son ahora. Solo quiero estabilidad, lo único que busco es sentir 'certeza'... de algo, de lo que sea.

No me hagan mucho caso, ya ven que a ratos me pongo nena...

Soy la chida de la historia... creo.


sábado, junio 02, 2012

Tarzán de mi alma...

En las noches lluviosas sé que te necesito más, no me preguntes, es solo que el clima ayuda a que mi cuerpo, mi alma y toda yo te reclame mío. Me gusta que el día refresque al final, así podré disfrutar del calor de tus brazos durante toda la noche. Sé que, a veces, mi termostato descompuesto es el impedimento para que me acurruque y encuentre el acomodo perfecto, sí, ese en el que nuestros cuerpos se funden en uno solo y dormimos sonrientes... esta noche es perfecta, mi termostato está de acuerdo.

Hace un rato platicábamos acerca de tus planes antes de conocerme... yo, la verdad es que no había pensado en los míos, es decir, no los tenía o, en realidad, los tenía demasiado ciertos y tú los alteraste por completo... Mis pretenciones iban mucho más lejos de lo que mi corazoncillo vulnerable permitió. Soledad disfrazada de trabajo y éxito profesional, ¿quién diría que solo tú estabas faltando en mi vida?.

Soy la misma, sí... la que te enamoró, la que te vuelve loco con sus caprichos e ideas tergiversadas, la misma que gimotea quedito cuando algo no sale bien y que, en cuanto tus brazos llegan al rescate, moja tus camisas con lágrimas que celebran tu presencia porque, seré honesta, a ratos no sabría qué hacer... ¡Te amo!

Sé que, de no habernos conocido, ambos nos habríamos ahorrado tantos y tantos momentos difíciles pero, cierto es también que, nos habríamos perdido de tantas sonrisas, tantos besos, tantas locuras y tantos 'teamos' que jamás serán suficientes para expresar lo que sentimos el uno por el otro... ¡Te amo!

Me enamoras más cada día, los ojitos de borrego a medio morir y la sonrisa de estúpida son culpa tuya de manera absoluta... Mi vida sería incompleta sin ti a mi lado. El café por la mañana y el beso de buenos días hacen que todo sea perfecto... sí, sí... ¡perfecto!, ¡te amo!

Acepto tu madridismo, tu afición/obsesión por los video juegos, tus 'detalles' y manías... me resigno a que no compartas algunas cuestiones sociales y religiosas... me adapto a tus necesidades... pero agradezco que tú hagas lo propio... me reconozco difícil y, sin embargo, sigues (seguimos) ahí. ¡Te amo!

Ahora me dispongo a refugiarme en tu pecho, cobijarme con tus brazos y dormir con tu aroma y todo tú para permanecer juntos siempre...

¡TE AMO!

Soy la chida de la historia

viernes, junio 01, 2012

Trabajando...


Es cierto, tengo un chingo de trabajo... el tiempo para cosas importantes está restringido por el momento, al menos hasta que viaje a tierras defeñas (de entrada por salida) y pueda volver a respirar tranquila, pausada y desparpajadamente sin preocupación alguna... al menos sin preocupaciones de la segunda edición... bla bla bla.

Las últimas semanas hemos estado durmiendo hasta tarde, digo hemos porque mi Tarzán anda en las mismas que yo... la chamba nos ha pegado y nosotros lo único que hacemos es enfrentarla sin mariconerías aunque la lana no fluya como nosotros quisiéramos. Son tiempos difíciles, nadie nos garantizó que sería de otra forma... pero estamos con la disposición a seguir adelante, hasta donde se pueda, hasta escupir el hígado de ser necesario.

Mis ojos se cierran, me duele la cabeza y los pies se me hinchan por tantas y tantas horas de permanecer sentada... y por el re pinche calor de mierda que, creo a todos, nos trae en chinga... sudando como marranos en cacerola.

Estoy ansiosa por ver rendir los frutos, tengo muchas ganas de volver a agarrar un ritmo de trabajo que me permita disfrutar de todo y todos aquellos a los que amo... Quiero planear unas vacaciones al lado de mi amor, me encantaría contar con la estabilidad suficiente para empezar a pensar en eso que... en fin.

No me pidan coherencia de letras, no la tengo ni de pensamientos... ni siquiera de emociones, chingao. Quería hacer tiempo mientras se cargan unas imágenes, se guardan otras y mi cabeza se desempolva para poner orden en los archivos y acercarme, un poquito más, a la conclusión de este proyecto... al menos en esta edición. =)

Ya me voy, pues... tengo un chingo de sueño.

Soy la chida de la historia.