viernes, octubre 17, 2014

F I N

Pocas personas entendían mi amistad con Rafa, el ya olvidado barón de 'bonais'… debo confesar que en ocasiones yo tampoco lo hacía… sin embargo, y haciendo un recuento (no solo de daños), hay muchas cosas que me hicieron permanecer ahí, cerca de él, disfrutando unas cosas y soportando otras. 

Hace aproximadamente una semana tomé la decisión de eliminar cualquier tipo de contacto con Rafa… las razones son tantas como innecesario listarlas aquí, sin embargo me gustaría decir las razones por las que defendí tanto mi relación con este individuo:


  • Apareció en mi vida en un momento en el que yo estaba tirada en el piso, acababa de sufrir una pérdida irreparable y mis intereses, de pronto, habían dejado de existir.
  • Él fue el ancla de la que me así para no hundirme.
  • Al principio nuestros intereses eran los mismos: pasar el rato y olvidarnos de la realidad.
  • Me conmovió su carácter introvertido.
  • Estuvo presente en momentos difíciles en los que, aquellos que se decían amigos y familia, prefirieron darme la espalda.


Podría agregar muchos puntos más a la lista, pero creo que estos son suficientes para dar una idea general… pero, después de todo, nada es para siempre… mi disposición y mi paciencia se agotaron, además mis prioridades ahora son otras. Creo que Rafa nunca entendió que él no era el centro de mi universo, que mi necesidad por evadir la realidad terminó hace mucho tiempo y que crecí… vaya que lo hice, mis ideas… mis sueños… mis deseos son ahora otros. 

Mis sentimientos también se modificaron, Rafa nunca me perdonó haber encontrado al amor de mi vida y volcar toda mi atención en él… siento mucho que mi felicidad no haya sido razón suficiente para respetar lo que era entonces y en lo que ha evolucionado ahora… 

Creía no tener alma de niñera y lo acabo de comprobar… fue la última vez que me dejé de lado por satisfacer los caprichos de alguien que no sabe lo que quiere pero, lo más importante, fue la última vez que (no) permití que alguien (haciéndose llamar mi amigo) habla mal de mí a personas de mi propia familia tratando de hacerme quedar como la culera del cuento.

Siento mucho que todo haya sido así… pero rechazar el abrazo y beso de 'judas' fue lo mejor que pude hacer… nunca ha sido mi estilo eliminar personas de mi vida, lo cual resultaría bastante complicado pues hubo momentos que ahora no concibo sin su presencia… pero si voy a tener amigos, prefiero que haya honestidad de por medio, si no, mejor será no tener ninguno.

Fin de la historia… y la chida sigo siendo yo.

¡A huevo!


2 comentarios:

iR. dijo...

y zas! leyendo ésta última entrada le diste en el clavo a algo que rondaba mi cabeza.... todo fin da pie a algo distinto y mejor.

la chida de la historia dijo...

"… todo fin da pie a algo distinto y mejor"

¡¡Definitivamente!! =)