Hoy di fin a un ciclo de mi vida, por fin, después de aplazarlo tantas y tantas veces, renuncié a la empresa en la que laboré los últimos 3 años...
No quiero (aunque puedo) hablar mal... lo único que diré, tal como me enseñó mi hermanaco Luisz, es 'que les vaya como se lo merezcan'... de ahí en fuera yo no sé.
Renuncié hoy por la mañana y esperaba una reacción distinta por parte de la que, hasta ese momento, fue mi jefa... sin embargo, al poco rato, me hizo recordar lo estúpida y carente de ética profesional que es... entonces la sorpresa ya no fue tan grande. Lo que se habló en una reunión de profesionales, a los 30 minutos, se convirtió en chisme de verdulería... los acuerdos a los que se había llegado valieron para 2 cosas... y la relación laboral se rompió para siempre...
Afortunadamente no soy una persona que guste de quedarse con los brazos cruzados y, la experiencia que acaso me dejó el paso por esa empresa, la ocuparé para el proyecto que requerirá de toda mi energía, concentración y entrega de ahora en adelante...
No guardo rencor... y quizá, de manera interna, deseo que algún día se trague todo el veneno que, regularmente, escupe a los demás... Hey, dije que no iba a hablar mal de la empresa... nunca dije nada con respecto a la cacatúa que la dirige... En fin... yo ya no pertenezco más ahí... quizá nunca lo hice.
Perdí energía, amistades, ratos con mi familia y con el amor de mi vida... y todo por sentirme comprometida, una vez más, con personas a las que les vale un cacahuate lo que soy, siento y deseo... A partir de hoy todo será distinto...
Mis sueños, anhelos y decisiones estarán enfocadas a un proyecto personal... algo de lo que forman parte las personas más queridas y, en las cuales, podría poner mi vida a resguardo...
Sin ser culpa de los tequilas que bebí a la hora de la comida, con la cual celebramos el inicio de este proyecto, quiero agradecer a quienes me han apoyado siempre, que han estado a mi lado y que han alimentado mis sueños... A mi familia, amigos y, sobre todo, a mi Tarzán del alma... no sé qué sería de mí sin ustedes y, claro, a mis 2 que 3 lectores que han demostrado que puedo contar con ellos... ¡quiero llorar!.
Los mantendré informados, claro, de lo que pase de ahora en adelante conmigo... deséenme suerte. ¡Los quiero!...
Soy la chida de la historia...
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